Al cumplirse un mes del homicidio de Fernando Villarroel, familiares, amigos y vecinos se concentraron en 25 de mayo y Alvear, para marchar desde allí hasta los tribunales de Esquel. En ese lugar se manifestaron y la madre de Fernando pronunció estas palabras.
Además entregaron en tribunales una nota acompañada por varias firmas, pidiendo la re ubicación de las familias de los agresores que participaron del homicidio de Fernando.
En esta nota, afirman que esas familias han sido protagonistas de numerosos problemas en el barrio Matadero, como “ruidos molestos, agresiones verbales y físicas con portación de armas y peleas callejeras, que afectan la paz y tranquilidad del resto de los vecinos”. Agregan más adelante “el hecho que las familias continúen en su lugar de residencia actual… puede desencadenar un futuro inconveniente”.



