En esta época en Esquel es común la presencia de hermosos ejemplares de Cachaña y un poco menos usual es la llegada de Loros Barranqueros. A una de estas especies se la asocia con predecir las nevadas y la otra tiene un color circense inconfundible. Mientras las Cachañas habitan en la zona, los Loros Barranqueros no se ven en Esquel todos los años. Conocé en este artículo la diferencia entre Cachañas y Loros Barranqueros.
Colorido
Existen varias diferencias entre los ejemplares de estas especies de loros. Aunque ambas son de color verde, el Loro Barranquero se distingue por tener un llamativo color amarillo en el vientre, en tanto que la cachaña es también verde, pero con una coloración rojiza en la panza donde no tiene amarillo.
Origen
Mientras el Loro Barranquero viene de la estepa, la Cachaña habita el oeste en los bosques. Si bien ambas especies tiene movimientos migratorios, la Cachaña se la asocia con anunciar nevadas, al bajar de los bosques en la montaña a los valles con las primeros fríos, heladas o nevadas.
En el caso de los Loros Barraqueros vienen migrando mayormente desde una de las colonias de loros más importantes en la zona de El Cóndor, cerca de Viedma.
Habitat
Las Cachañas habitan en los árboles y los Loros Barranqueros busca los riscos o paredes donde excavan cuevas, o como su nombre lo indica los barrancos.
Loros Barranqueros
El loro barranquero (Cyanoliseus patagonus) es el loro que vive más al sur. En Argentina desde la pre cordillera andina en el noroeste hasta las estepas patagónicas en el sur. Habita praderas abiertas y valles boscosos con barrancas. Viven en colonias y excavan sus cuevas-nido haciendo túneles en las barrancas de piedra arenisca, caliza o tierra.
La colonia más grande está 3 km al oeste de la villa El Cóndor, en Río Negro.
Su pico es bien encorvado y ganchudo. Sus patas son gruesas y fuertes con dos dedos dirigidos hacia adelante y dos hacia atrás. El pico es otra herramienta para asirse con firmeza y facilitar el desplazamiento entre las ramas de los árboles y mantenerse en cualquier posición, incluso cabeza abajo. Con la llegada del invierno migran al norte buscando clima propicio. Su diálogo multitudinario se prolonga cuando se posan en los árboles. En bulliciosas bandadas, pueden mantener un vuelo sostenido. Cuando hay viento fuerte vuelan al ras del suelo. Comienzan su actividad con el amanecer. En procura de alimento se posan en árboles y arbustos, prefieren semillas. A picotazos rompen las cáscaras.
Cachaña
NOMBRES VULGARES: Cachaña, Cotorra Austral. NOMBRE CIENTÍFICO: Enicognathus ferrugineus. Habita la zona cordillerana de Patagonia, desde la Provincia de Neuquén hasta Tierra del Fuego. La Cachaña es verde con las plumas de la corona y la espalda ribeteadas de negro. La cola es rojiza oscura como así también una mancha ventral. El pico es ganchudo, ancho y corto. Esta particularidad le permite perforar y romper duras semillas para procurarse su alimento. Además es una «tercera pata» a la hora de desplazarse entre las ramas de los árboles. Su lengua es gruesa y dura.
Es frecuente verlo en bandadas de 10 a 50 o más individuos; de vuelo muy veloz en sus desplazamientos, es fácil localizarlo por sus fuertes y constantes vocalizaciones, parado puede pasar desapercibido, ya que es capaz de permanecer quieto y en completo silencio.
Durante la primavera y el verano pasa su tiempo en los bosques de altura, lengales, y ñirantales, donde se alimenta y cría en los huecos de los grandes árboles. Ubica el nido en el fondo de algún agujero en los troncos y lo tapiza con vegetales y plumas; pone hasta 8 huevos de color blanco. En otoño, cuando las primeras nevadas caen en lo alto de los cerros y el frío intenso se deja sentir por efecto de las heladas, las cachañas se desplazan bajando a los valles en busca de clima templado; en muchas ocasiones se las puede observar volando a gran altura de un cerro a otro, y no es raro que las bandadas bajen hasta el fondo de los valles directamente en veloces picadas; en los lugares poblados encuentran abundante comida en algunos frutales, especialmente manzanas no recolectadas; también aprovechan las semillas, pequeñas frutas de Laura, Maitenes, Maqui y otros arbustos; suelen bajar al suelo para alimentarse de las partes tiernas y las semillas de plantas; es llamativo el silencio que saben guardar mientras se alimentan; alarmados, suelen volar rápidamente entre los árboles, irrumpiendo en sonoros griteríos.









