Estuvo entre los iniciales pobladores de Esquel y se lo recuerda como pionero en varias actividades y profesiones. Fue uno de los primeros concejales de la ciudad, tuvo una fábrica de mosaicos, fue sodero, panadero, albañil, carpintero y comerciante. Construyó el monolito ubicado en la rotonda de las avenidas Fontana y Ameghino. Y cuando aún hoy parece novedoso fabricar cerveza en Esquel, Ervedo Rossi hace 100 años en la década de 1920 fabricaba en cerveza de muy buena calidad. Tuvo 16 hijos y el 7º varón fue apadrinado por el entonces presidente de la Argentina, Marcelo Torcuato de Alvear. Se casó en 1907 Ana Rosa Poblete (nativa de Junín de los Andes) e instalaron su hogar en Esquel en una superficie de 5 mil metros en Darwin 470 entre Ameghino y San Martín, donde levantaron la fábrica y la casa familiar.
Memoria viva
Nació el 25 de septiembre de 1881 en el pueblo de San Leo, en Pesaro – Italia y murió en el Hospital Durand de Buenos Aires en 1942. Como fue un hombre bueno, su memoria se mantiene viva no solo en su familia, sino también en el recuerdo de sus compatriotas y amistades.
Trabajar era su ley
Vino a Chubut cerca de 1900 contratado por empresarios alemanes radicados en Comodoro Rivadavia, para la construcción de viviendas. Como albañil estuvo también en Rawson, en Malaspina y Cabo Raso. En Rawson colocó ladrillos para la gobernación, la iglesia y el colegio de las hermanas. Otro tanto hizo en Esquel ya en 1906. Era un buen operario y la casa familiar la levantó el mismo. Luego de unos años se trasladó a Paso de Indios, comenzando a criar ganado y comerciando. Así fundó una casa de negocios y se hizo hacendado. Construyó una rueda para sacar agua para la quinta. Eso fue un gran trabajo, una obra de paciencia y tenacidad. Los cangilones que utilizó fueron tablas de 30 cajones de kerosén.
Inteligente y hábil
El viajero Tomás Cranwell que por entonces hizo el trayecto entre Trelew a Río Pico, publicó una crónica en la revista metropolitana del 18 de octubre de 1913, en la que se refiere a Ervedo Rossi. “Llegamos a la casa de Ervedo Rossi, hombre inteligente y hábil, es constructor de una rueda hidráulica rústica, que llena perfectamente su objetivo siendo propulsada por la corriente misma del rio, desviada hábilmente que eleva la altura del agua unos dos metros para regar una quinta, que se divisa desde lejos como una manchita verde oscura en el valle polvoriento y gris”.
Nuevas empresas industriales en Esquel.
De Paso de Indios, lugar de nacimiento de algunos de sus hijos, regresa a Esquel cerca de 1913 y continúa evidenciando su aptitud y voluntad. Se necesitaba una panadería y esta empresa surge construyendo el mismo el horno y elaborando pan. Le tiene un amor vivísimo a la industria, a los inventos y a las artesanías. Se hace sodero, cervecero, carpintero y calero, tareas en las que pasó muchos años, ganando a veces bastante. En la sodería fueron repartidores sus hijos. Las máquinas para la cervecería se las compró a un tal Schneider de San Martín y como la cerveza era rica y generaba ingresos, trajo máquinas desde Alemania, aunque esto fue un mal negocio ya que el técnico no supo entenderse con ellas y cuando vino la crisis de 1923 la empresa se malogró.
Fábrica de mosaicos
La fábrica de mosaicos nació como fuente de trabajo y de lucha fiel a su origen. Única en la comarca data de 1932 y sus productos muy bien presentados todavía están en muchos edificios locales, como en otros puntos tan lejanos como Río Pico o Comodoro Rivadavia. La empresa giraba a nombre de Ervedo Rossi, teniendo como maestro principal y administrador a Luis Rossi. Todo cuanto producía la fábrica bien montada y que trabajaba con 10 operarios, pasaba enseguida a la construcción sin la menor demora.
Primera calidad
La fábrica de cerveza Italo Argentina de Ervedo Rossi publicitaba en el Diario Esquel de la época, anunciando a su “numerosa y distinguida clientela, que el producto estaba elaborado con malta de primera calidad, sin contener mezcla de ningún otro cereal que no sea cebada y lúpulo, pudiendo proporcionar al consumidor en esta apartada región cordillerana una bebida más genuina, tónica y reconstituyente que las elaboradas en otras localidades”.
Refería la publicidad que “El pedir cerveza Rossi implica ser coadyuvador de engrandecimiento de la industria local y denota un rasgo de patriotismo al protegerla, por cuanto a ella la forma un capital genuinamente argentino.
No olvide: El ahorro consiste en saber emplear su dinero. Consumiendo cerveza Rossi usted ahorra el suyo”.
Concejal y monolito
El pueblo lo respetaba y le tenía confianza, tanto que fue uno de los primeros concejales de Esquel en 1924.
Por el aniversario de la llegada de los Rifleros y Fontana al Valle 16 de Octubre, construyó el monolito ubicado en las avenidas de Fontana y Ameghino, inaugurado el 25 de noviembre de 1935 al cumplirse 50 años del arribo de dicha expedición estatal. El monolito lo construyó Ervedo Rossi y no cobró; para colmo, cuando recuperó algunas bolsas del cemento utilizado en la obra, en la municipalidad lo denunciaron.
Agua surgente
En 1929 hizo un pozo de agua surgente muy recordado, ya que fue de 120 metros con un caño de cuatro pulgadas cuyo chorro llegaría a alcanzar los ocho metros de altura, para el asombro de sus hijos y peones. También en su casa hizo un pozo de unos 45 metros.
Accidente
En 1940 Don Ervedo anda con sus peones buscando un lugar donde sacar piedras de cal cerca de Los Repollos camino a Bariloche, se le da vuelta el camión y casi se mata. Se desgarró gran parte del cuero cabelludo y le afectó bastante la vista. Uno de los peones también resultó mal herido y otro se pega tal julepe que “se hizo humo”. Si no es por unos turistas, Rossi y el otro herido lo hubieran pasado peor en aquella oportunidad.
Producción
Durante la época de la sodería viajaba seguido a Trelew a buscar el gas indispensable para la producción. Tenía un Ford T para esos viajes. Y cuentan que en una cubierta auxiliar llegó a llevar hasta 70 mil pesos suyos y de otros vecinos para pagos comerciales y depósitos bancarios. Era un hombre sencillo, de buen carácter y conversador. “Fue casi un niño hasta su muerte” refirió uno de sus hijos, que “no sabía cuándo le iba bien y cuando le iba mal”.
Fuentes.
Noticias de Esquel.
Diario Esquel.
Familia de Ervedo Rossi
